Campañas de marketing con valores

Alinear nuestra misión, visión y valores

Cuando empezamos a establecer los cimientos de nuestro proyecto y a construir nuestra marca, es imprescindible definir los parámetros principales como punto de partida: la misión, visión y valores de nuestra marca.

¿Qué ventajas tiene? Nos permitirá construir nuestra marca desde los: la razón por la que existe, el objetivo que perseguimos y bajo qué valores lo vamos a realizar. 

Centrándonos en el punto del que hablaremos a lo largo de estás líneas, el de los valores, queremos mostrar su importancia y el significado real que supone para las marcas y para los clientes hoy en día.

A lo largo de estas líneas, te vamos a enseñar cómo puedes empezar a construir una marca que enamore por sus valores fuertes y estables, por el propósito compartido que persigue y  la importancia de tomar acciones para lograrlo.

También, te presentaremos algunos ejemplos que pueden ayudar a coger nuevas ideas sobre qué rumbo puedes tomar, dependiendo de la marca que quieras lanzar al mercado.

Cómo construir una marca con valores 

En la era de la información, donde todos podemos estar informados de cualquier tema que nos presente inquietud, las marcas se han parado a reflexionar y a implicarse en ofrecer soluciones.

La buena reputación de una marca es, hoy en día, más frágil que nunca, por lo que se esmeran en ser más responsables y evitar problemas, ya sea a su personal, a sus clientes, a la sociedad o al medio ambiente.

Toda esta información a la que tenemos acceso, nos influye, consciente o inconscientemente, y, por tanto, nos lleva a actuar con más perspicacia a la hora de elegir comprar un servicio y/o producto, comparando entre una marca y otra. 

El precio está dejando de ser el motivo exclusivo de compra

Actualmente, esa perspectiva ha cambiado. El nuevo perfil de cliente y, muy especialmente las nuevas generaciones, se centran en temas relacionados con la responsabilidad social, la sostenibilidad, la solidaridad o la inclusión social.

El precio no deja de ser importante para la decisión de compra, obviamente, pero ante productos o servicios similares, se decantarán por el que, además, transmita valores y propósitos sociales.

Así que, debemos empezar a construir una marca partiendo de la base de la ética, focalizándose, así, en lo que conocemos como marketing ético. 

Es importante establecer un plan estratégico de comunicación y marketing basado en los valores, para que, poco a poco, vaya conectando con los clientes y sumando propósitos.

Por otro lado, recuerda que no solo es construir una marca con valores; también deberás establecer colaboraciones con marcas que estén alineadas con los tuyos o bajo una filosofía similar, por ejemplo, tus proveedores.

En definitiva, nuestro objetivo es humanizar nuestra marca y, que cuando un cliente la elija, sienta la satisfacción, no solo de haber obtenido algo deseado, sino también, lo que ha aportado a la sociedad, al planeta, en el proceso de compra. 

Cumple lo que dices, difundes y prometes

Informar de lo que queremos hacer por la sociedad y por el planeta es el primer paso, pero ya conocerás la frase “las palabras se las lleva el viento”. Lo realmente difícil es llevarlo a cabo.

¿De qué sirve crear y establecer un plan de marketing basado en valores, si luego, a la hora de la verdad, no se hace nada? ¡Toma acción desde el principio!

A continuación te vamos a dar algunos ejemplos que pueden ayudarte a tener ideas y qué puedes hacer en la práctica:

• Marcas de alimentos: Si tu marca se centra en ofrecer productos alimenticios, puedes trabajar en la optimización de los recursos reciclando material, utilizando biocombustibles, productos ecológicos o de origen natural, y usando las nuevas tecnologías para ser eficiente en el uso de los recursos naturales. También puedes promover en el packaging hábitos sostenibles y saludables.
• Marcas de cosméticos: Si en cambio, tu marca se basa en el mundo de la cosmética y belleza, puedes ofrecer productos a tus clientes que no sean testados en animales, que los recipientes sean biodegradables o de fácil reciclaje, dejando de lado el plástico y utilizando más el vidrio reciclado, por ejemplo. Tampoco utilices pesticidas o químicos perjudiciales para la salud. 
• Marcas de moda: La moda es una de las industrias más contaminantes del mundo. Es por ello que, las nuevas marcas emergentes están trabajando en la sostenibilidad, creando tiendas de segunda mano, servicio de alquiler de ropa y/o, usando materiales sostenibles como la lana o el algodón orgánico.
• Marcas de productos para el hogar: Igual que en los cosméticos o alimentos, te sugerimos evitar los contenedores de plástico o solo utilizar los de plástico reciclado. Evita presentar los productos con plástico sobre plástico o cartón. Imprime en las etiquetas el uso adecuado para su reciclaje.